sábado, 10 de diciembre de 2011

Artificial

Entregas día y noche tu belleza, naciste siendo hermosa, pero en tu interior sufres el no poder ser normal.
Te toco fingir una vida, te toco fingir ser real, pobre de ti mi pequeña rosa artificial. Jamás darás tu aroma a los sentidos del hombre y mucho menos tus espinas clavaras a los dedos inquietos que te deseen tocar.

Naciste para mentir a los ojos de los demás, mi bella rosa artificial. Nunca disfrutaras del roció de la mañana, no sabrás que es marchitarse en el tiempo.
No sentirás la suave brisa que golpee tus pétalos y tampoco oirás los elogios a tu delicado ser.
Nunca la muerte veraz, estas condenada  a fingir felicidad, siempre viva, siempre joven, así serás tu mi pequeña rosa artificial.